jueves, abril 26, 2012






¿Por qué comprar arte?

Hay varias razones por las que adquirir una obra de arte. Porque la obra gusta y se puede comprar; generalmente esta razón va ligada a las emociones, nos relacionamos de alguna manera con lo que el artista transmite. Como inversión: El arte ha probado para muchos ser una inversión muy rentable, claro que siempre conlleva un riesgo. Como símbolo de estatus y pertenencia social. Para formar una colección. Finalmente la razón más común es estética; la pieza combina con el decorado de un lugar. Aunque no se debe dejar de lado la adquisición como parte de una moda.

En la subasta de noviembre del 2011 Sotheby's vendió 315.8 millones de dólares, mucho más de los 270 millones que tenían estimado. En los últimos años en el arte contemporáneo las ventas de las casas de subastas más famosas del mundo: Sotheby,s y Christie´s han sido coyunturales. Los grandes museos organizan una retrospectiva de un artista y poco tiempo después la galería saca a subasta la obra. Las piezas han alcanzado precios nunca antes vistos: Gerhard Richter vendió en la última subasta de Sotheby's una pieza por 20 millones de dólares. Después de la retrospectiva de Damien Hirst en la Tate Gallery se planea, en la próxima subasta, sacar un lote sólo de sus obras. ¿Entonces cómo decidirse por un cuadro, escultura... en particular? Gabriela Palmieri VP de la casa de subastas Sotheby's NY menciona que lo más importante es ver: ir a ferias, museos, galerías; leer revistas de arte, meterse a portales, investigar. Yo digo: Enamorarse de la pieza y soñar con ella; nunca tendría cerca de mi una obra que no disfrute observar cada que paso frente a ella.





La relación del espectador con la obra de arte siempre es distinta; ya sea que se esté en un museo frente a un gran maestro o se esté buscando una pieza para una colección, invariablemente se adquiere una relación emocional con la pieza. Palmieri cuenta una anécdota de una de las piezas que más ha disfrutado vendiendo. Se trata de un arte objeto de Joseph Cornell: una caja de la serie Aviary boxes —que consta de 26 cajas y explora el simbolismo de las aves y las jaulas. La caja la encontró en el departamento de una anciana de 90 años que tras varios martinis le contó que se la habían regalado los padres de su novia con la que vivió más de cuarenta años. Son los años 50 y se enamoran dos mujeres sureñas; lo impensable, se van a vivir a NY y para decorar su casa reciben esta caja. Nos gustó mucho porque éramos dos chicas de campo, y nos encantó el pájaro dentro de la caja (Las cajas de Cornell, —que pueden ser calificados como auténticos poemas visuales llenos de magia, o sueños representados en un escenario). La caja salió a subasta en 600 mil dólares y se vendió en 1.7 millones de dólares. Era la única que faltaba para completar la serie.





Este año la feria de arte contemporáneo zona Maco, la exhibición más prestigiosa de América Latina, incluyó más de 90 galerías, que representaron a más de 900 artistas. En un evento de 5 días se congregaron: coleccionistas, curadores, directores de museos, galeristas y artistas además de la participación masiva del público mexicano con más de 35 mil visitantes. Al observar a los visitantes de la feria no pude dejar de preguntarme ¿qué motiva la visita a una feria de arte; comprar una pieza? No lo sé al final del recorrido vi tanto que estaba un poco mareada, y para ser honesta después de la feria me siguen gustando las mismas tres cosas que me gustaban antes de entrar. En el 2013 se celebra el X aniversario de la feria del 10 al 14 de abril: la cual incluirá una nueva sección dedicada al arte moderno latinoamericano.







Publicado en Milenio